Ya son dos los países que han perdido la confianza en el navegador Internet Explorer. Los Gobiernos de Francia y Alemania han recomendado a los internautas utilizar una alternativa al navegador de Microsoft.
Microsoft ha alegado en su defensa, que el riesgo para los usuarios de su navegador era bajo, y que si se reforzaba la configuración de seguridad del mismo no habría problema alguno.
Las autoridades alemanas aseguran que esto último no es cierto, y que ni siquiera en esas circunstancias harían de Internet Explorer un navegador seguro.
Microsoft por su parte respondió que todos los ataques llevados a cabo contra Google aprovechando los fallos de seguridad de su navegador fueron orientados contra objetivos muy específicos, y en ningún caso contra usuarios comunes.
Según la Sophos, el aviso del Gobierno alemán se refiere a las versiones 6,7 y 8 de Internet Explorer, y asegura que en Internet ya se pueden encontrar “guías” e instrucciones sobre cómo aprovechar estos problemas de seguridad.
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