Tras varios intentos realizados en los últimos tres años, los fabricantes de televisores han decidido apostar por la integración de Internet en sus productos, gracias al lanzamiento de varios dispositivos que permitirán interactuar con la caja tonta.
A la existente Apple TV, se deben añadir productos como Revue (adaptador para Google TV) o Boxee Box.
De momento, las personas que pueden disfrutar de contenidos web mientras ven la tele, sólo son aquellos que adquirieron una pantalla plana cara con aplicaciones de Internet, o adquiriendo algún dispositivo que permitiera la interacción con la web desde un televisor, como Roku XR, Tivo o Apple TV.
Es necesario destacar que todas estas soluciones tienen un problema en común, y es la imposibilidad de acceder libremente a la red, limitando el acceso a Youtube, Flickr, Facebook o canales de alquiler de películas (NEtfix y Amazon VoD).
La plataforma Google TV, además de incluir las aplicaciones citadas, permitirá navegar por la red de forma libre, utilizando para ello el navegador Google Chrome, como si de un ordenador se tratase.
El dispositivo, que costará unos 199 dólares saldrá a la venta en noviembre.
Como competidor directo, está Apple TV, que permitirá un nivel de interacción mucho más limitado, pero también será mucho más económico, ya que su precio rondará los 99 dólares.
El producto llega con la idea de convertirse en un videoclub casero con tarifas competitivas y acceso a algunas aplicaciones de Internet.
El tiempo dirá cual de los dos enfoques (Google-Apple) es el que demanda el público con más intensidad.
Fuente: www.elmundo.es