En nuestro blog, hemos informado ya con anterioridad de que el buscador de Internet Google ha tenido serios problemas en varios países por la utilización del sistema Street View. En consecuencia ha sido denunciada por violación de datos privados en 30 países, entre ellos España, Alemania, Reino Unido y Estados Unidos, donde la empresa se enfrenta a una acusación popular. La polémica surgió cuando se descubrio que Google, con ocasión de fotografiar las calles de las ciudades captaba también señales privadas wi-fi relativas a las redes particulares.
Pues, por fin ha llegado la primera sentencia y la filial de Google en Australia ha sido hallada culpable de haber obtenido ilegalmente datos privados de ciudadanos al realizar las fotografías de las calles y viviendas para su aplicación de mapas en Internet, pero quedó sin castigo.
Karen Curtis, la comisaria australiana de Privacidad, admitió que su organismo no puede imponer sanciones pero aceptará las disculpas de la empresa estadounidense, según la agencia AAP.
En la sentencia se dice que el buscador cometió un delito al tomar esa información de las redes inalámbricas domésticas sin consultar previamente con sus titulares.
Curtis pidió a Google que haga un asesoramiento sobre impacto de privacidad en cada actividad de recogida de datos desde la calle y que entregue una copia a su oficina, mientras la compañía anunció que colaborará con las autoridades locales.
La toma ilegal de datos fue limitada porque la cámara montada sobre un coche sólo es capaz de detectar a aquellos usuarios que estaban conectados a la Red cuando el automóvil pasó por delante de sus casas, aunque también falló el sistema que iba a descartar la información de quienes no tenían protegida su conexión.
Fuente: www.elmundo.es