Philip Hammond, el ministro británico de Defensa, acaba de anunciar la creación de un cuerpo de reservistas para formar un Ejército cibernético. La creación de esta unidad tiene como objetivo no solamente defenderse ante un eventual ciberataque, sino estar preparados para lanzar sus propios ataques en el ciberespacio contra posibles enemigos nacionales.
De acuerdo a sus palabras, la guerra cibernética es una realidad que no puede obviarse, cuyos ataques deliberados pueden debilitar o anular los sistemas de comunicaciones del enemigo, siendo vital en cualquier estrategia de defensa. La estrecha colaboración en materia de espionaje y seguridad con Estados Unidos convierten a este país en un objetivo potencial de los ciberataques, especialmente después de los papeles filtrados por el ex empleados de la NSA Edward Snowden al diario inglés The Guardian.
Esta unidad reservista pretende trabajar en conjunto con las fuerzas regulares, para proteger las redes críticas de ordenadores y datos vitales para el Estado, disponiendo de conocimientos en común que puedan ser aprovechados por la nación. En palabras del ministro: “como respuesta a la creciente amenaza cibernética, estamos desarrollando una cibercapacidad de espectro total, incluida la capacidad de atacar, para mejorar la gama de capacidades militares de Reino Unido”.
El ministerio ha detallado cuales deben ser los requisitos mínimos que deben cumplir los candidatos para poder optar a esta unidad, que deberán ser mayores de 18 años, británicos o pertenecientes a un país de la Commonwealth, haber vivido en Reino Unido al menos los últimos 5 años, ser capaces de someterse a entrenamiento entre 19 y 27 días al año, disponer de tiempo los fines de semana para apoyar misiones de ciberseguridad, superar un proceso de seguridad y tener aptitudes cibernéticas excepcionales, relacionadas con redes o lenguajes, entre otros.
Lo más curioso de la noticia es que se trata del primer país que admite públicamente la creación de una fuerza cibernética capaz de atacar y no actuar únicamente de forma defensiva. Muchos expertos afirman que las guerras del futuro no tendrán lugar en las calles, sino entre expertos de telecomunicaciones, siendo capaces de poder inhabilitar sus arsenales o potencial militar: “la gente piensa en lo militar como algo de tierra, mar y aire. Nosotros hace tiempo que hemos incorporado una cuarta esfera: el espacio. Estamos ante una nueva frontera en materia de Defensa. Durante años hemos estado construyendo una capacidad defensiva para protegernos de ciberataques. Eso ya no es suficiente”, advierte.
Iván Ontañón
Consultor Derecho NNTT
Áudea Seguridad de la Información
Fuente: El País